Casa en el Aire

 

Ubicación: Dos Hermanas (Sevilla)

Promotor: Privado

Año Proyecto: 2011

Presupuesto Ejecución Material: 74.580,00 €

Año Construcción: 2013

Constructora: Magorga / Autoconstrucción

Fase: Terminada

 

Sobre una edificación existente cuyo uso principal es el de almacén se nos encarga la elevación de una planta más  un castillete de acceso a la cubierta para distribuir una vivienda nueva.

Uno de los condicionantes principales, como punto de partida, fue adaptarnos a la estructura existente del inmueble de modo que, con la nueva intervención, integremos perfectamente la ampliación propuesta con el edificio existente ya que, al encontrarse en estado aceptable y manteniendo viva la conciencia sostenible, podemos reutilizarla, ahorrar tiempo, recursos económicos y  energéticos.

Salvados los aspectos estructurales se plantea una vivienda donde la zona de día -compuesta por cocina, salón-comedor y un baño- se dispone en las primeras crujías vinculada a la fachada del inmueble y la zona de noche -compuesta por dormitorios y baño- en las crujías posteriores vinculada a los patios de luces propuestos.

En el salón-comedor, y como elemento de union entre zonas, se propone un mueble oculto de suelo a techo en el que se integra el paso al vestíbulo de entrada de la vivienda, albergando en su interior estantes y zona de almacenaje según se encuentre en la zona de estar o en la zona de comedor.

A pesar de poder colmatar la vivienda con un programa más extenso que incluya alguna habitación más, se opta, a petición de la propiedad, a crear estancias más amplias que las estándares, de modo que dotaran a la vivienda de un grado mayor de confortabilidad para sus usuarios.

Dejamos volando una planta. Le quitamos los pies. Por diversos motivos (faseado de obra, plazos de ejecución…) quitamos la parte baja de ese edificio. Dejamos «en el aire» la nueva planta para poner una nueva distribución de la fachada. Es una operación muy arriesgada porque se apoya sobre un muro de carga, no hay pilares, la planta de arriba se apoya completamente ahí, así que tuvimos que «sostener» toda una planta mientras operarios trabajan debajo. Lo ideal hubiera sido hacerlo todo de abajo a arriba pero no era el caso y hay que afrontarlo como un reto.